Oh Señor, mi corazón ya no es ambicioso
Salmo 131 (130)
OH SEÑOR, MI CORAZÓN YA NO ES AMBICIOSO
NI SE ELEVA CON SOBERBIA MI MIRADA,
NI VOY EN BUSCA DE COSAS GRANDES
QUE SON SUPERIORES A MIS FUERZAS.
Aquietada y acallada está mi alma
como un niño pequeño en brazos de su madre.
¡Como un niño amamantado está mi espíritu,
como un niño, dentro de mí!
OH SEÑOR, MI CORAZÓN YA NO ES AMBICIOSO …
Aquietada y acallada está mi alma …
¡Espere, Israel, en el Señor!
¡ESPERE, ISRAEL, EN EL SEÑOR!
¡Espere, Israel, ahora y siempre!
NI SE ELEVA CON SOBERBIA MI MIRADA,
NI VOY EN BUSCA DE COSAS GRANDES
QUE SON SUPERIORES A MIS FUERZAS.
Aquietada y acallada está mi alma
como un niño pequeño en brazos de su madre.
¡Como un niño amamantado está mi espíritu,
como un niño, dentro de mí!
OH SEÑOR, MI CORAZÓN YA NO ES AMBICIOSO …
Aquietada y acallada está mi alma …
¡Espere, Israel, en el Señor!
¡ESPERE, ISRAEL, EN EL SEÑOR!
¡Espere, Israel, ahora y siempre!