corazón
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29
Al despertar
Salmo 17 (16)
AL DESPERTAR
ME SACIARÉ DE TU SEMBLANTE, SEÑOR.
AL DESPERTAR
ME SACIARÉ DE TU SEMBLANTE, SEÑOR.
Escucha, Señor, mi oración,
atiende, Señor, a mi clamor,
presta oídos a mi súplica,
que mis labios no traicionan, Señor.
Salga de ti la sentencia,
porque tus ojos ven, tus ojos ven mi rectitud.
AL DESPERTAR …
Sondea, Señor, mi corazón,
escrútalo de noche, Señor;
pruébame al crisol, pruébame al crisol
porque tú sabes que no hay malicia en mí;
que mi boca no miente como hacen los hombres.
Que he guardado tu Palabra,
que no he seguido los caminos del violento,
que a tus huellas he ajustado mis pasos,
que no vacilaré, que no vacilaré.
AL DESPERTAR …
A ti yo te invoco, Señor;
concédeme, Señor, una respuesta;
muéstrame los prodigios de tu amor,
porque tú salvas al que se apoya en ti,
porque tú ayudas
al que se refugia a tu derecha.
Como a la niña de tus ojos guárdame,
a la sombra de tus alas escóndeme,
mira que quieren matarme.
AL DESPERTAR …
Míralos, están cerrados en su orgullo,
hablan, la arrogancia está en su boca.
Avanzan contra mí, avanzan contra mí.
¡Ayúdame tú, Señor,
líbrame de los hombres de este mundo,
de los hombres cuyo premio es esta vida!
¡Cólmalos de tus bienes, Señor,
llénales el vientre y que sus hijos se sacien!
Que yo al despertar, que yo por tu amor
me saciaré de tu rostro Señor.
AL DESPERTAR …
35
Alzaos puertas
Salmo 24 (23)
Del Señor es la tierra,
DEL SEÑOR ES LA TIERRA,
y todo aquello que contiene,
Y TODO AQUELLO QUE CONTIENE,
el orbe y sus habitantes.
¡ALZAOS PUERTAS.
ALZAD LOS DINTELES,
PUERTAS ETERNAS,
DEBE ENTRAR EL REY
DE LA GLORIA, DE LA GLORIA!
¿Quién es ese Rey de la gloria?
¿QUIÉN ES ESE REY DE LA GLORIA?
El Señor, el fuerte, el valiente,
EL SEÑOR, EL FUERTE, EL VALIENTE,
el Señor valiente en la batalla,
VALIENTE EN LA BATALLA.
El Señor de los ejércitos.
EL SEÑOR DE LOS EJÉRCITOS.
Él es el Rey de la gloria,
EL REY DE LA GLORIA.
¡ALZAOS PUERTAS …
¿Quién subirá al monte del Señor?
¿QUIÉN SUBIRÁ AL MONTE DEL SEÑOR?
El de manos inocentes y puro corazón,
EL DE MANOS INOCENTES
y puro corazón,
el que no conduce su vida por vanidad,
POR VANIDAD.
Y nosotros somos su Iglesia,
Y NOSOTROS SOMOS SU IGLESIA,
que hoy viene a tu presencia,
QUE HOY VIENE A TU PRESENCIA;
que busca tu rostro, oh Dios de Jacob,
OH DIOS DE JACOB.
¡ALZAOS PUERTAS …
50
Cántico de los tres jóvenes
Daniel 3,57-58
Criaturas todas del Señor.
BENDECID AL SEÑOR.
Ensalzadlo
CON HIMNOS POR LOS SIGLOS.
Ángeles del Señor. BENDECID ...
Cielos.
BENDECID ...
Aguas del espacio. BENDECID ...
Ejércitos del Señor. BENDECID ...
Sol y Luna.
BENDECID ...
Astros del Cielo.
BENDECID ...
Lluvia y rocío.
BENDECID ...
Vientos todos.
BENDECID ...
Fuego y calor.
BENDECID ...
Fríos y heladas.
BENDECID ...
Rocíos y nevadas. BENDECID ...
Témpanos y hielos. BENDECID ...
Escarchas y nieves. BENDECID ...
Noche y día.
BENDECID ...
Luz y tinieblas.
BENDECID ...
Rayos y nubes.
BENDECID ...
Bendiga la tierra al Señor.
LO ENSALCE
CON HIMNOS POR LOS SIGLOS.
Montes y cumbres.
BENDECID ...
Cuanto germina en la tierra. BENDIGA ...
Manantiales.
BENDECID ...
Mares y ríos.
BENDECID ...
Cetáceos y peces.
BENDECID ...
Aves del cielo.
BENDECID ...
Fieras y ganados.
BENDECID ...
Ensalzadlo
CON HIMNOS POR LOS SIGLOS.
Hijos de los hombres.
BENDECID ...
Bendiga Israel al Señor.
BENDIGA ...
Sacerdotes del Señor.
BENDECID ...
Siervos del Señor.
BENDECID ...
Almas y espíritus justos.
BENDECID ...
Santos y humildes de corazón. BENDECID ...
Ananías, Azarías y Misael.
BENDECID ...
Ensalzadlo
CON HIMNOS POR LOS SIGLOS.
61
Decidle a los de corazón cansado
Isaías 35,4ss
Decidle a los de corazón cansado,
decídselo, decídselo a los pobres:
¡Ánimo no temáis,
que vuestro Dios viene a salvaros!
Ya se abren los ojos de los ciegos,
se abren los oídos de los sordos.
El cojo salta como un ciervo,
grita de júbilo la lengua del mudo.
PORQUE SE ABRIRÁ UN CAMINO,
UN CAMINO DE SALVACIÓN;
UNA SENDA, UNA VÍA
PARA LOS POBRES.
Y por ella retornarán
los rescatados del Señor.
Y POR ELLA RETORNARÁN
LOS RESCATADOS DEL SEÑOR.
Todos los pobres, ciegos y cojos,
los alejados del Señor.
TODOS LOS POBRES, CIEGOS Y COJOS,
LOS ALEJADOS DEL SEÑOR.
¡Los pecadores!
Y CANTARÁN FELICIDAD,
Y CANTARÁN FELICIDAD.
ALELUYA, ALELUYA.
ALELUYA, ALELUYA.
ALELUYA, ALELUYA.
ALELUYA, ALELUYA.
62
Delante de los ángeles
Salmo 138 (137)
DELANTE DE LOS ÁNGELES
PARA TI YO CANTARÉ, SEÑOR.
DELANTE DE LOS ÁNGELES
PARA TI SALMODIARÉ.
DARÉ GRACIAS A TU NOMBRE,
PARA TI SALMODIARÉ.
Te doy gracias, Señor, de todo corazón
porque tus promesas han superado tu fama.
Cuando te invoqué, tú me escuchaste,
diste fuerza y vigor a mi alma.
DELANTE DE LOS ÁNGELES …
Te darán gracias, Señor,
los reyes de la tierra,
al escuchar las palabras de tu boca;
y cantarán en el camino del Señor.
Dirán: «¡qué grande es tu amor!»
DELANTE DE LOS ÁNGELES …
¡Sublime es el Señor,
que mira hacia el humilde,
conoce al soberbio, le mira desde lejos!
Mas cuando yo camino
en medio de la angustia,
extiende su mano y su diestra me salva.
DELANTE DE LOS ÁNGELES …
El Señor terminará en mí lo comenzado.
¡Porque es eterno su amor!
¡No abandona la obra de sus manos!
¡Señor, no nos abandones!
DELANTE DE LOS ÁNGELES …
70
Elí, Elí, lamá sabactaní
Salmo 22 (21)
ELÍ, ELÍ, LAMÁ SABACTANÍ.
DIOS MÍO, DIOS MÍO:
¿POR QUÉ ME HAS ABANDONADO?
¡Qué lejos te siento de mis gritos!
De día clamo, y no respondes,
grito de noche, y no hay reposo para mí.
ELÍ, ELÍ, LAMÁ SABACTANÍ …
¡Mas tú eres el Santo,
tú que vives en medio de mi pueblo!
A ti clamaron nuestros padres,
y tú les ayudaste,
en ti confiaron, y nunca quedaron confundidos.
Entonces, Dios, ¿por qué no me ayudas?
¿Acaso no soy un hombre?
Eso soy yo: soy un gusano,
desprecio de la gente, asco del pueblo,
todos los que me ven de mí se ríen,
menean la cabeza y dicen:
«Se confió a Dios, ¡que él lo libre,
que él le salve, si tanto dice que le ama!»
Sí, que tú me amas, sí, que tú me quieres,
en el seno de mi madre me formaste;
cuando me dio a luz ya me ofreció a ti,
desde el vientre tú ya eras mi Dios.
ELÍ, ELÍ, LAMÁ SABACTANÍ …
Soy agua sucia que se tira,
todos mis huesos se dislocan,
mi corazón como cera
se derrite en mis entrañas.
Mi paladar está seco como teja,
y mi lengua está pegada a la garganta.
ELÍ, ELÍ, LAMÁ SABACTANÍ …
Perros innumerables me rodean,
una banda de malhechores me acomete,
taladran mis manos y mis pies.
Se pueden contar mis huesos;
me observan y me miran, se reparten
mis vestidos, se sortean mi túnica.
¡Mas tú, Dios mío, no estés lejos,
ven en mi ayuda, fuerza mía,
libra mi alma de la espada,
libra mi vida de las fauces del león,
libra mi alma de los cuernos de los búfalos!
¡Anunciaré, yo, tu nombre a mis hermanos,
en medio de la asamblea te cantaré!:
«Los que a Yahveh amáis, dadle alabanza,
raza de Jacob, glorificad a Yahveh,
temedle, pueblo de Israel.»
Porque ha sido el Único
que no has tenido asco de este pobre
ni has desdeñado la miseria de mi vida;
no me ha ocultado su rostro cuando le invocaba.
Por eso, yo ahora sé que los pobres vivirán,
los pobres comerán, serán saciados,
los que buscan a Yahveh lo encontrarán:
¡su corazón, su corazón, vivirá para siempre!
73
Escóndeme en lo oculto de tu tienda
Salmo 27 (26)
ESCÓNDEME
EN LO OCULTO DE TU TIENDA,
SOBRE TU ROCA LEVÁNTAME.
Yahveh es mi luz y mi salvación,
¿a quién he de temer?
Yahveh es el refugio de mi vida,
¿por quién he de temblar?
ESCÓNDEME ...
Cuando se acercan contra mí los malvados
a devorar mi carne,
son ellos, mis adversarios y enemigos,
los que tropiezan y sucumben.
ESCÓNDEME ...
Aunque acampe un ejército contra mí,
mi corazón no teme;
aunque estalle una guerra contra mí,
estoy seguro en ella.
ESCÓNDEME ...
Una cosa he pedido a Yahveh,
eso solo estoy buscando:
habitar en la Casa del Yahveh,
todos los días de mi vida.
ESCÓNDEME ...
Él me dará cobijo en su cabaña
el día de la desdicha;
me esconderá en lo oculto de su tienda,
sobre su roca me levantará.
ESCÓNDEME ...
Escucha, Yahveh, mi voz que clama,
¡tenme piedad, respóndeme!
Sí, Yahveh, tu rostro busco:
no me ocultes tu rostro.
ESCÓNDEME ...
83
Hasta cuándo
Salmo 13 (12)
¿Hasta cuándo,
por fin te acordarás, Yahveh, de mí,
y tu rostro a mí lo volverás?
CANTARÉ A YAHVEH,
CANTARÉ AL QUE ES MI REDENTOR.
¡Mírame, respóndeme,
Yahveh, amor de mí!
¡Alumbra mis ojos,
no me duerma yo en la muerte!
CANTARÉ A YAHVEH …
¡Que no puedan
decir mis enemigos: «¡Le vencí!»,
mis enemigos
se alegrarán si yo cayera!
CANTARÉ A YAHVEH …
Pero yo espero en tu piedad;
y mi corazón
se alegrará en tu salvación.
CANTARÉ A YAHVEH …
101
PROCLAMA MI ALMA
LA GRANDEZA DEL SEÑOR,
SE ALEGRA MI ESPÍRITU
EN DIOS MI SALVADOR.
Desde ahora me felicitarán
todas las generaciones.
DESDE AHORA ME FELICITARÁN
TODAS LAS GENERACIONES,
porque el Poderoso
ha hecho grandes cosas en mí:
su nombre es santo.
PORQUE EL PODEROSO
HA HECHO GRANDES COSAS EN MÍ:
SU NOMBRE ES SANTO.
Él hace proezas con su brazo:
dispersa a los soberbios de corazón.
ÉL HACE PROEZAS CON SU BRAZO:
DISPERSA A LOS SOBERBIOS DE CORAZÓN,
derriba a los poderosos
y ensalza a los humildes,
A LOS HAMBRIENTOS
COLMA DE BIENES
Y A LOS RICOS DESPIDE VACÍOS.
Auxilia a Israel, su siervo,
acordándose de la misericordia.
AUXILIA A ISRAEL, SU SIERVO,
ACORDÁNDOSE DE LA MISERICORDIA
como lo había prometido
en favor de Abraham.
COMO LO HABÍA PROMETIDO
EN FAVOR DE ABRAHAM.
PROCLAMA MI ALMA …
107
Me enseñarás el camino de la vida
Salmo 16 (15)
ME ENSEÑARÁS EL CAMINO DE LA VIDA,
ME ENSEÑARÁS EL CAMINO DE LA VIDA,
ME SACIARÁS DE GOZO, EN TU PRESENCIA,
DE ALEGRÍA PERPETUA A TU DERECHA.
Protégeme, Dios mío, en ti me refugio.
Yo digo a Dios: «Tú eres mi Señor.
Sin ti no tengo nada.»
ME ENSEÑARÁS …
El Señor es mi heredad y mi copa,
mi vida está en sus manos;
me ha tocado en suerte un lote hermoso,
me encanta mi heredad.
Bendigo al Señor que me aconseja;
hasta de noche instruye mi corazón;
tengo siempre delante de mí al Señor;
está a mi derecha, no vacilaré.
ME ENSEÑARÁS …
Por eso se alegra mi corazón,
exulta mi alma,
y mi carne descansa serena;
porque no abandonarás
mi vida en el sepulcro,
ni dejarás que tu santo
experimente la corrupción,
la corrupción.
ME ENSEÑARÁS …
108
Me has seducido, Señor
Jeremías 20,7-18
ME HAS SEDUCIDO, SEÑOR,
Y ME HE DEJADO SEDUCIR;
HAS LUCHADO CONMIGO
Y ME HAS VENCIDO.
HAS SIDO MÁS FUERTE QUE YO,
ME HAS PODIDO.
Cuando hablo debo gritar:
«¡Violencia!», «¡Opresión!»
Así tu Palabra es para mí befa y oprobio.
Me decía: «No pensaré más en Él,
no hablaré más en su Nombre.»
Mas en mi corazón
había un fuego ardiente,
que corría por mis huesos.
MAS EN MI CORAZÓN
HABÍA UN FUEGO ARDIENTE,
QUE CORRÍA POR MIS HUESOS.
ME HAS SEDUCIDO, SEÑOR …
¡Maldito el día en que nací!
¡Maldito el hombre
que le dio la noticia a mi padre:
«Te ha nacido un hijo»!
¿Por qué he salido del seno de mi madre,
si sólo debo ver penas y aflicción?
MAS EL SEÑOR ESTÁ CONMIGO,
COMO UN HÉROE VALEROSO.
Cantad himnos al Señor, alabad su Nombre,
que ha salvado la vida de este pobre.
MAS EL SEÑOR ESTÁ CONMIGO,
COMO UN HÉROE VALEROSO.
ME HAS SEDUCIDO, SEÑOR …
110
Misericordia mía, misericordia
Salmo 51 (50) “Miserere”
Misericordia mía, Misericordia.
MISERICORDIA MÍA, MISERICORDIA.
Misericordia, Dios mío, por tu bondad,
POR TU INMENSA COMPASIÓN
BORRA MI CULPA;
lava del todo mi delito,
LIMPIA MI PECADO.
MISERICORDIA MÍA, MISERICORDIA ...
Pues yo reconozco mi culpa,
TENGO SIEMPRE PRESENTE MI PECADO:
contra ti, contra ti sólo pequé,
COMETÍ LA MALDAD QUE ABORRECES.
En la sentencia tendrás razón,
EN EL JUICIO RESULTARÁS INOCENTE.
Mira, que en la culpa nací,
PECADOR ME CONCIBIÓ MI MADRE.
Te gusta un corazón sincero,
Y EN MI INTERIOR ME INCULCAS SABIDURÍA.
Rocíame con el hisopo: quedaré limpio;
LÁVAME: QUEDARÉ
MÁS BLANCO QUE LA NIEVE.
Hazme oír el gozo y la alegría,
QUE SE ALEGREN
LOS HUESOS QUEBRANTADOS.
Aparta de mi pecado tu vista,
BORRA EN MÍ TODA CULPA.
Oh Dios, crea en mí un corazón puro,
RENUÉVAME POR DENTRO
CON ESPÍRITU FIRME;
no me arrojes lejos de tu rostro,
NO ME QUITES TU SANTO ESPÍRITU.
Devuélveme la alegría de tu salvación,
AFIÁNZAME CON ESPÍRITU GENEROSO;
enseñaré a los malvados tus caminos,
LOS PECADORES VOLVERÁN A TI.
Líbrame de la sangre,
oh Dios, Dios Salvador mío,
Y CANTARÁ MI LENGUA TU JUSTICIA.
Señor, me abrirás los labios,
Y MI BOCA PROCLAMARÁ TU ALABANZA.
Los sacrificios no te satisfacen:
SI TE OFRECIERA UN HOLOCAUSTO,
TÚ NO LO QUERRÍAS.
Mi sacrificio es un espíritu quebrantado;
UN CORAZÓN QUEBRANTADO Y
HUMILLADO, TÚ NO LO DESPRECIAS.
Señor, por tu bondad, favorece a Sión,
RECONSTRUYE
LAS MURALLAS DE JERUSALÉN:
Entonces aceptarás los sacrificios rituales,
ofrendas y holocaustos,
SOBRE TU ALTAR
SE INMOLARÁN NOVILLOS.
MISERICORDIA MÍA, MISERICORDIA …
114
Oh Dios, por tu nombre sálvame
Salmo 54 (53)
¡ OH DIOS, POR TU NOMBRE SÁLVAME,
POR TU PODER HAZME JUSTICIA,
OH DIOS, ESCUCHA MI ORACIÓN,
ATIENDE A LAS PALABRAS DE MI BOCA!
Porque los arrogantes se han aliado contra mí,
los prepotentes andan buscando mi vida,
no tienen nunca a Dios presente,
no tienen nunca a Dios presente.
MAS VED, QUE DIOS VIENE EN MI AYUDA,
EL SEÑOR, EL SEÑOR ME SOSTIENE.
De todo corazón le ofreceré un sacrificio,
celebraré su nombre, porque es bueno,
de toda angustia él me ha liberado,
de toda angustia él me ha liberado,
de toda angustia él me ha liberado. Oh… …oh
OH DIOS, POR TU NOMBRE SÁLVAME …
119
Os tomaré de entre las naciones
Cántico de Ezequiel – Ez 36,24-28
OS TOMARÉ DE ENTRE LAS NACIONES,
OS REUNIRÉ DE TODOS LOS PUEBLOS.
OS ROCIARÉ CON AGUA PURA
Y YO OS PURIFICARÉ.
Os daré un corazón nuevo,
infundiré en vosotros un espíritu nuevo,
os quitaré el corazón de piedra,
os daré un corazón de carne.
OS TOMARÉ DE ENTRE LAS NACIONES …
Pondré mi Espíritu dentro de vosotros
y haré que caminéis según mi Palabra.
Vosotros seréis mi pueblo
y yo seré vuestro Dios.
OS TOMARÉ DE ENTRE LAS NACIONES …
121
SI SIENTES UN SOPLO DEL CIELO,
UN VIENTO QUE MUEVE LAS PUERTAS,
ESCUCHA LA VOZ QUE TE LLAMA,
TE INVITA A CAMINAR LEJOS.
ES FUEGO QUE NACE
EN QUIEN SABE ESPERAR,
EN QUIEN SABE NUTRIR
ESPERANZAS DE AMOR.
Eran pobres hombres
como tú, como yo,
habían echado las redes al lago,
recogido los impuestos
a la puerta de la ciudad.
Que yo recuerde
entre ellos no había ningún doctor;
y aquel que llamaban Maestro
estaba muerto y sepultado.
SI SIENTES UN SOPLO DEL CIELO ...
Tenían un corazón como tú, como yo,
que una mano de hielo oprimía;
tenían los ojos llenos de lágrimas.
Pensaban sin duda en el amigo perdido;
en la mujer dejada en la puerta de la casa;
en la cruz levantada en la cima del monte.
SI SIENTES UN SOPLO DEL CIELO ...
Y el viento llamó a la puerta de la casa,
entró como un rayo en toda la estancia;
y tuvieron los ojos y el corazón llenos de fuego,
salieron a la calle gritando de alegría.
Hombre que esperas
escondido en las sombras,
la voz que canta es para ti;
te trae la alegría de una buena noticia:
¡EL REINO DE DIOS HA LLEGADO YA!
SI SIENTES UN SOPLO DEL CIELO ...
125
Porque mi yugo es suave
Mateo 11,28-30
Venid a mí vosotros todos
que estáis cansados y agobiados,
que yo os aliviaré, que yo os aliviaré.
Tomad sobre vosotros mi yugo,
y aprended de mí,
que soy manso y humilde de corazón;
y hallaréis descanso para vosotros,
y encontraréis reposo para vuestro espíritu.
PORQUE MI YUGO ES SUAVE,
PORQUE MI YUGO ES SUAVE
Y MI CARGA LIGERA,
PORQUE MI YUGO ES SUAVE
Y MI CARGA LIGERA.
Venid a mí … … descanso para vosotros,
y encontraréis reposo para vuestras almas.
PORQUE MI YUGO ES SUAVE …
126
Qué amables son tus moradas
Salmo 84 (83)
¡Qué amables son tus moradas, Señor,
Señor de los ejércitos!
Mi alma ansía y anhela
los atrios del Señor.
Hasta el pájaro encuentra una casa,
la golondrina su nido;
¡junto a tus altares, Señor,
rey mío y Dios mío!
¡REY MÍO Y DIOS MÍO!
DICHOSOS LOS QUE VIVEN EN TU CASA,
SIEMPRE CANTAN TUS AMORES,
SIEMPRE CANTAN TUS AMORES.
DICHOSO EL QUE ENCUENTRA
EN TI LA FUERZA,
Y EN SU CORAZÓN DECIDE
EL SANTO VIAJE.
PASANDO POR EL VALLE DEL LLANTO,
ÉL LO CAMBIA EN BENDICIÓN.
CRECE EN EL CAMINO SU VIGOR,
HASTA LLEGAR A SIÓN,
HASTA LLEGAR A SIÓN.
Mejor es un día en tus atrios
que mil fuera de ellos,
QUE MIL FUERA DE ELLOS,
porque estar en el umbral de tu casa
es siempre mejor
QUE HABITAR EN LOS PALACIOS.
PASANDO POR EL VALLE DEL LLANTO …
DICHOSOS LOS QUE VIVEN …
… EL SANTO VIAJE.
129
Quiero cantar
Salmo 57 (56)
QUIERO CANTAR, A TI QUIERO CANTAR.
¡DESPIERTA, DESPIERTA GLORIA MÍA!
¡DESPIERTA, ARPA Y CÍTARA!
Misericordia, Dios mío, misericordia,
que mi alma se refugia en ti;
me refugio a la sombra de tus alas
hasta que pase el peligro.
QUIERO CANTAR ...
Invoco a Dios, al Dios Altísimo,
a Dios que ha hecho tanto por mí.
Desde el cielo me envía la salvación,
confunde a los que ansían matarme.
QUIERO CANTAR ...
Misericordia, Dios mío, misericordia,
que estoy echado entre leones,
leones devoradores de hombres;
sus dientes son lanzas y flechas.
QUIERO CANTAR ...
Misericordia, Dios mío, misericordia,
que han tendido una red a mis pasos,
me han cavado delante una fosa,
¡pero han sido ellos los que han caído en ella!
QUIERO CANTAR ...
Mi corazón está firme, Dios mío,
para ti, oh Dios, quiero cantar,
¡a la aurora yo quiero despertar!,
¡despertad, arpa y cítara!
QUIERO CANTAR ...
Te daré gracias ante los pueblos, Señor,
cantaré, cantaré ante las naciones;
porque tu amor ha sido grande conmigo,
tu bondad más alta que los cielos.
QUIERO CANTAR ...
136
Señor, ayúdame a no dudar de ti
Kiko Argüello
¡Señor, ayúdame, Señor,
a no dudar de ti!
¡SEÑOR, AYÚDAME, SEÑOR,
A NO DUDAR DE TI!
¡Señor, ayúdame, Señor,
a no dudar nunca de tu Amor!
¡SEÑOR, AYÚDAME, SEÑOR,
A NO DUDAR NUNCA DE TU AMOR!
Tu gracia derramando
dejó mi corazón ya florecido
de mil ansias de amor,
de mil ansias de amor.
Que más no puedo que sufrir
que vivir en un gemido.
Y en esta llama de tu amor oscura,
en esta tela que envuelve mi alma
y la sofoca,
siento mi corazón que se disloca,
que se abre y se derrama
como agua que inunda tu jardín.
¡SEÑOR, AYÚDAME, SEÑOR, …
Y EN ESTA LLAMA DE TU AMOR …
… COMO AGUA QUE INUNDA TU JARDÍN.
141
Si hoy escucháis su voz
Salmo 95 (94)
SI HOY ESCUCHÁIS SU VOZ
NO ENDUREZCÁIS EL CORAZÓN.
Venid, aclamemos al Señor,
demos vítores a la roca que nos salva;
vayamos a él dándole gracias,
aclamándolo con cantos y salmos.
SI HOY ESCUCHÁIS SU VOZ …
Porque el Señor es un Dios grande,
más grande que todos los dioses;
suyo es el mar, suya es la tierra,
son suyas las cumbres de los montes.
SI HOY ESCUCHÁIS SU VOZ …
Entrad, postrémonos por tierra,
bendiciendo al Señor creador nuestro.
Porque él es nuestro Dios,
y nosotros su pueblo,
el rebaño que él conduce.
SI HOY ESCUCHÁIS SU VOZ …
¡Ojalá, ojalá escuchéis hoy su voz!:
«no endurezcáis el corazón como en Meribá,
como el día de Masá en el desierto,
donde vuestros padres dudaron de mí,
aunque habían visto mis obras
me obligaron a hacer su voluntad.»
«Durante cuarenta años
me disgustó aquella generación,
y dije: es un pueblo de corazón extraviado,
no quiere conocer mis caminos.
Por eso: ¡no entrarán en mi descanso!»
SI HOY ESCUCHÁIS SU VOZ …
147
Te estoy llamando, Señor
Salmo 141 (140)
TE ESTOY LLAMANDO,
TE ESTOY LLAMANDO, SEÑOR,
VEN CORRIENDO,
ESCUCHA MI VOZ QUE YO A TI GRITO.
VALGA ANTE TI MI ORACIÓN
COMO INCIENSO,
EL ALZAR DE MIS MANOS
COMO SACRIFICIO DE LA TARDE.
Pon, Señor, a mi boca un centinela,
una guardia a la puerta de mis labios.
No sea que se incline mi corazón a la maldad,
a cometer acciones criminales.
Que el justo me golpee por amor, y me corrija,
para que el ungüento del malvado
no perfume mi cabeza,
porque yo me enviciaría en su maldad,
porque yo me enviciaría en su maldad.
TE ESTOY LLAMANDO …
A ti, Señor, miran mis ojos,
¡en ti me refugio no desampares mi alma!
Guárdame tú del lazo que me tienden,
de las trampas de tantos enemigos.
Caigan ellos, cada uno en su red,
que yo unido a ti paso indemne,
que yo unido a ti paso indemne.
TE ESTOY LLAMANDO …
148
Te he manifestado mi pecado
Salmo 32 (31)
TE HE MANIFESTADO MI PECADO,
NO HE TENIDO ESCONDIDOS MIS ERRORES;
HE DICHO: «CONFESARÉ AL SEÑOR MI CULPA.»
Y TÚ HAS PERDONADO
LA MALICIA DE MI PECADO.
¡Dichoso el hombre
al que le son perdonadas sus culpas,
y que le fueron cubiertos sus pecados!
Dichoso el hombre
al que el Señor no imputa ningún mal,
y en cuyo espíritu no hay engaño.
TE HE MANIFESTADO MI PECADO …
Callaba y se consumían mis huesos
gimiendo todo el día,
porque día y noche
pesaba tu mano sobre mí;
como estío de verano
estaba árido mi corazón.
Mas te he manifestado mi pecado,
no he tenido escondidos mis errores;
he dicho: «confesaré al Señor mi culpa.»
Y tú has perdonado la malicia de mi pecado.
TE HE MANIFESTADO MI PECADO …
Por eso te suplican tus fieles
en el día de la angustia,
cuando las aguas caudalosas se desbordan,
mas a él no le alcanzarán.
Tú eres mi refugio,
tú me preservas del peligro,
me rodeas de cantos de salvación.
Me dices: «te haré sabio,
te indicaré el camino de la vida.»
TE HE MANIFESTADO MI PECADO …
154
Ven, Espíritu Santo
Secuencia de Pentecostés
VEN, ESPÍRITU SANTO,
ENVÍA UN RAYO DE TU LUZ.
Ven, padre de los pobres,
ven, luz del corazón.
Ven, consolador buenísimo,
dulce huésped del alma.
VEN, ESPÍRITU SANTO …
Ven, dulce refrigerio,
en la fatiga tú eres descanso;
en el calor tú eres nuestro alivio;
en el llanto eres consuelo.
VEN, ESPÍRITU SANTO …
Oh luz dichosísima
inunda de tu resplandor
lo íntimo del corazón de tus fieles,
llega hasta el fondo del alma.
VEN, ESPÍRITU SANTO …
Sin tu luz nada hay puro en el hombre,
nada hay inocente.
Mira la fuerza del pecado,
cuando tú no estás con nosotros.
VEN, ESPÍRITU SANTO …
Lava lo que está sucio,
riega lo que está árido,
sana lo que está enfermo.
Convierte al duro y al rígido.
VEN, ESPÍRITU SANTO …
Inflama lo que está tibio,
encamina al que se ha extraviado.
Danos tus siete dones,
danos tu amor y tu alegría.
VEN, ESPÍRITU SANTO …
Danos virtud y premio,
danos la alegría de la salvación,
danos una muerte santa,
danos el gozo eterno.
VEN, ESPÍRITU SANTO …
Danos sabiduría y entendimiento,
danos ciencia y piedad,
danos consejo y fortaleza,
danos el temor de Dios.
VEN, ESPÍRITU SANTO …
Danos tus santos frutos:
danos paciencia y bondad,
danos amor y alegría,
danos justicia y verdad.
VEN, ESPÍRITU SANTO …
156
Veni creator
Himno de vísperas de Pascua, de la Ascensión a Pentecostés
VEN, ESPÍRITU CREADOR
VISITA NUESTRA MENTE;
LLENA DE TU AMOR
EL CORAZÓN QUE HAS CREADO.
Oh dulce consolador,
don del Padre altísimo,
agua viva, fuego, amor,
santo crisma del alma.
DEDO DE LA MANO DE DIOS,
PROMESA DEL SALVADOR,
DERRAMA TUS SIETE DONES,
SUSCITA EN NOSOTROS LA PALABRA.
Sé luz del intelecto,
llama ardiente en el corazón,
sana nuestras heridas
con el bálsamo de tu amor.
DEFIÉNDENOS DEL ENEMIGO,
DANOS EL DON DE LA PAZ.
TU GUÍA INVENCIBLE
NOS PRESERVE DEL MAL.
Oh Luz de eterna sabiduría,
desvélanos el gran misterio
de Dios Padre y del Hijo,
unidos en un solo amor.
AMÉN.
172
Bendición penitencial
Oración conclusiva de acción de gracias para la Celebración Penitencial
El Señor esté con vosotros.
Y CON TU ESPÍRITU.
Levantemos el corazón.
LO TENEMOS
LEVANTADO HACIA EL SEÑOR.
Demos gracias al Señor, nuestro Dios.
ES JUSTO Y NECESARIO,
ES JUSTO Y NECESARIO.
Realmente es justo y necesario,
es nuestro deber y salvación
glorificarte, siempre Señor,
que admirablemente has creado al hombre,
y más admirablemente has hecho en él
una nueva creación.
Tú, no abandonas al pecador,
sino que lo llamas por la fuerza de tu amor.
Tú, has enviado a tu Hijo al mundo,
para destruir el pecado y la muerte,
y en su resurrección
nos has devuelto la vida y la alegría.
Tú, nos renuevas por la fuerza del Evangelio
y de los Sacramentos.
Tú, has derramado el Espíritu Santo
en nuestros corazones,
para hacernos herederos e hijos tuyos.
TÚ, NOS LIBRAS
DE LA ESCLAVITUD DEL PECADO
Y NOS TRANSFORMAS DÍA A DÍA
EN LA IMAGEN DE TU HIJO.
Alabamos y bendecimos tu Nombre
y te damos gracias
por las maravillas de tu misericordia.
Y con los ángeles y los santos, cantamos,
cantamos el himno de tu gloria.
SANTO, SANTO, SANTO ...
179
Letanías penitenciales II
Letanía para la Celebración Penitencial
Por los pecados que hemos cometido
endureciendo nuestro corazón.
TEN PIEDAD DE MÍ,
QUE SOY UN PECADOR.
Señor, ten piedad.
SEÑOR, TEN PIEDAD.
Por los pecados que hemos cometido
por ignorancia,
TEN PIEDAD DE MÍ …
Por los pecados que hemos cometido
a través de la sexualidad,
TEN PIEDAD DE MÍ …
Por los pecados que hemos cometido
tanto en público como en privado,
TEN PIEDAD DE MÍ …
Por los pecados que hemos cometido
engañando a nuestros semejantes,
TEN PIEDAD DE MÍ …
Por los pecados que hemos cometido
por el uso de la violencia,
TEN PIEDAD DE MÍ …
Por los pecados que hemos cometido
insultando con nuestras palabras,
TEN PIEDAD DE MÍ …
Por los pecados que hemos cometido
despreciando a nuestros
padres y maestros,
TEN PIEDAD DE MÍ …
Por los pecados que hemos cometido
dejándonos dominar
por nuestras bajas pasiones,
TEN PIEDAD DE MÍ …
Señor, ten piedad.
SEÑOR, TEN PIEDAD.
Por los pecados que hemos cometido
por medio de la mentira,
TEN PIEDAD DE MÍ …
Por los pecados que hemos cometido
por medio del soborno,
TEN PIEDAD DE MÍ …
Por los pecados que hemos cometido
por medio de la calumnia,
TEN PIEDAD DE MÍ …
Por los pecados que hemos cometido
en nuestras relaciones comerciales,
TEN PIEDAD DE MÍ …
Por los pecados que hemos cometido
por medio de la comida y la bebida,
TEN PIEDAD DE MÍ …
Por los pecados que hemos cometido
a través del orgullo,
TEN PIEDAD DE MÍ …
Por los pecados que hemos cometido
por medio de la murmuración,
TEN PIEDAD DE MÍ …
Por los pecados que hemos cometido
por medio de la mirada codiciosa,
TEN PIEDAD DE MÍ …
Por los pecados que hemos cometido
por medio de la mirada deshonesta,
TEN PIEDAD DE MÍ …
Señor, ten piedad.
SEÑOR, TEN PIEDAD.
Por los pecados que hemos cometido
incurriendo en la prostitución,
TEN PIEDAD DE MÍ …
Por los pecados que hemos cometido
por falta de sinceridad,
TEN PIEDAD DE MÍ …
Por los pecados que hemos cometido
a través de la envidia,
TEN PIEDAD DE MÍ …
Por los pecados que hemos cometido
por irresponsabilidad,
TEN PIEDAD DE MÍ …
Por los pecados que hemos cometido
sembrando la cizaña y el chisme,
TEN PIEDAD DE MÍ …
Por los pecados que hemos cometido
hablando mal de otros,
TEN PIEDAD DE MÍ …
Por los pecados que hemos cometido
resistiéndonos a la voluntad de Dios,
TEN PIEDAD DE MÍ …
Señor, ten piedad.
SEÑOR, TEN PIEDAD.
182
Plegaria Eucarística II - Modelo I (1ª parte)
Modelo I
El Señor esté con vosotros.
Y CON TU ESPÍRITU.
Levantemos el corazón.
LO TENEMOS LEVANTADO
HACIA EL SEÑOR.
Demos gracias al Señor, nuestro Dios.
ES JUSTO Y NECESARIO,
ES JUSTO Y NECESARIO.
En verdad es justo y necesario,
es nuestro deber y salvación
darte gracias, siempre y en todo lugar,
a ti, Padre Santo,
por Jesucristo, tu Hijo amado.
Por él, que es tu Palabra,
hiciste todas las cosas.
Tú nos lo enviaste hecho hombre
por obra del Espíritu Santo,
para que, nacido de María la Virgen,
fuera nuestro Salvador y Redentor.
Él, en cumplimiento de tu voluntad,
para destruir la muerte
y manifestar la resurrección,
extendió sus brazos en la cruz,
y así adquirió para ti un pueblo santo.
MURIENDO
DESTRUYÓ NUESTRA MUERTE,
RESUCITANDO
RESTAURÓ NUESTRA VIDA.
Por eso, con los ángeles y los santos,
cantamos tu gloria diciendo:
SANTO, SANTO, SANTO ...
185
Plegaria Eucarística II - Modelo II
Modelo II (1987)
El Señor esté con vosotros.
Y CON TU ESPÍRITU.
Levantemos el corazón.
LO TENEMOS LEVANTADO
HACIA EL SEÑOR.
Demos gracias al Señor, nuestro Dios.
ES JUSTO Y NECESARIO.
Verdaderamente
es justo y necesario,
es nuestro deber y fuente de salvación
darte gracias, siempre y en todo lugar.
A ti, Padre Santo, por Jesucristo,
tu amadísimo Hijo.
Por él, que es tu Palabra viviente,
hiciste todas las cosas;
tú nos lo enviaste Salvador y Redentor
hecho hombre por obra del Espíritu Santo,
y nacido de la Virgen María,
para cumplir tu voluntad
y adquirir para ti un pueblo santo,
Él extendió sus brazos en la cruz,
muriendo destruyó la muerte.
Y proclamó
la resurrección.
Y PROCLAMÓ
LA RESURRECCIÓN.
Por este misterio de salvación,
unidos a los ángeles y a los santos
cantamos a una sola voz
el himno de tu gloria:
SANTO, SANTO, SANTO ...
Santo eres en verdad, Señor,
fuente de toda santidad:
santifica estos dones
con la efusión de tu Espíritu,
de manera que sean para nosotros
Cuerpo y Sangre de Jesucristo,
Nuestro Señor.
El cual, cuando iba a ser entregado
a su Pasión, voluntariamente aceptada,
tomó pan, dándote gracias,
lo partió y lo dio a sus discípulos, diciendo:
Tomad y comed todos de él,
porque esto es mi Cuerpo,
que será entregado por vosotros.
Del mismo modo, acabada la cena,
tomó el cáliz, y dándote gracias de nuevo,
lo pasó a sus discípulos, diciendo:
Tomad y bebed todos de él,
éste es el cáliz de mi Sangre,
Sangre de la alianza nueva y eterna,
que será derramada por vosotros
y por todos los hombres,
que será derramada por vosotros
y por todos los hombres
para el perdón de los pecados.
Haced esto en conmemoración mía.
Este es el sacramento de nuestra fe.
ANUNCIAMOS TU MUERTE, SEÑOR,
PROCLAMAMOS TU RESURRECCIÓN,
¡VEN, SEÑOR JESÚS!
¡VEN, SEÑOR JESÚS!
Así, pues, Padre, al celebrar ahora
el memorial de la muerte
y resurrección de tu Hijo,
te ofrecemos el pan de vida
y el cáliz de salvación,
y te damos gracias porque nos haces dignos
de servirte en tu presencia.
Te pedimos humildemente
que el Espíritu Santo congregue en la unidad
a cuantos participamos
del Cuerpo y Sangre de Cristo.
Acuérdate, Señor, de tu Iglesia
extendida por toda la tierra;
y con el Papa …,
con nuestro obispo …
y de todos los que en ella cuidan de tu pueblo,
llévala a su perfección por la caridad.
Acuérdate también de nuestros hermanos
que durmieron en la esperanza
de la resurrección,
y de todos los que han muerto
en tu misericordia;
admítelos a contemplar la luz de tu rostro.
Ten misericordia de todos nosotros,
y así, con María, la Virgen Madre de Dios,
San José su santo esposo, los apóstoles
y cuantos vivieron en tu amistad
a través de los tiempos
merezcamos, por tu Hijo Jesucristo,
compartir la vida eterna
y cantar tus alabanzas.
Por Cristo, con Cristo y en Cristo,
a ti, Dios Padre omnipotente,
en la unidad del Espíritu Santo,
todo honor y toda gloria
por los siglos de los siglos.
AMÉN, AMÉN, AMÉN.
188
Plegaria Eucarística IV
(1988)
El Señor esté con vosotros.
Y CON TU ESPÍRITU.
Levantemos el corazón.
LO TENEMOS LEVANTADO
HACIA EL SEÑOR.
Demos gracias al Señor, nuestro Dios.
ES JUSTO Y NECESARIO,
ES JUSTO Y NECESARIO.
Realmente es justo darte gracias,
y deber nuestro glorificarte, Padre Santo,
porque tú eres el único Dios vivo y verdadero
que existes desde siempre y vives
para siempre; luz sobre toda luz.
Porque tú solo eres bueno y fuente de vida,
hiciste todas las cosas,
para colmarlas de tus bendiciones
y alegrar su multitud
con la claridad de tu gloria.
Por eso, innumerables ángeles en tu presencia,
contemplando la gloria de tu rostro,
te sirven siempre y te glorifican sin cesar.
Y con ellos también nosotros, llenos de alegría,
y por nuestra voz las demás criaturas,
aclamamos tu nombre cantando:
SANTO, SANTO, SANTO ...
Te alabamos, Padre Santo, porque eres grande,
porque hiciste todas las cosas
con sabiduría y amor.
A imagen tuya creaste al hombre
y le encomendaste el universo entero,
para que, sirviéndote a ti, su creador,
dominara todo lo creado.
Y cuando por desobediencia perdió tu amistad,
no lo abandonaste al poder de la muerte
sino que, compadecido,
tendiste la mano a todos,
para que te encuentre el que te busca.
Reiteraste, tu alianza a los hombres;
por los profetas los fuiste llevando
con la esperanza de la salvación.
Padre Santo, tanto amaste al mundo
que, al cumplirse la plenitud de los tiempos,
nos enviaste como salvador a tu único Hijo.
El cual se encarnó por obra del Espíritu Santo,
nació de María la Virgen,
y así compartió en todo,
nuestra condición humana,
menos en el pecado;
anunció la salvación a los pobres,
la liberación a los oprimidos
y a los afligidos el consuelo.
Para cumplir tus designios,
él mismo se entregó a la muerte
y, resucitando, destruyó la muerte.
RESUCITANDO,
DESTRUYÓ LA MUERTE
Y NOS DIO NUEVA VIDA.
Y para que no vivamos ya
para nosotros mismos, sino para él,
que por nosotros murió y resucitó,
envió, Padre, desde tu seno el Espíritu Santo
como primicia para los creyentes,
a fin de santificar todas las cosas
llevando a plenitud tu obra en el mundo.
Y este mismo Espíritu santifique, Señor,
estas ofrendas, para que sean Cuerpo
y Sangre de Jesucristo, Nuestro Señor,
y así celebremos el gran misterio
que nos dejó, como alianza eterna.
Porque él mismo llegada la hora en que había
de ser glorificado por ti, Padre Santo,
habiendo amado a los suyos que estaban
en el mundo, los amó hasta el extremo.
Y, mientras cenaba con sus discípulos,
tomó pan, te bendijo,
lo partió y se lo dio, diciendo:
Tomad y comed todos de él,
porque esto es mi Cuerpo,
que será entregado por vosotros.
Del mismo modo, tomó el cáliz
lleno del fruto de la vid y te dio gracias,
lo pasó a sus discípulos diciendo:
Tomad y bebed todos de él,
porque este es el cáliz de mi Sangre,
Sangre de la alianza nueva y eterna,
que será derramada por vosotros
y por todos los hombres,
para el perdón de los pecados.
Haced esto en conmemoración mía.
Este es el sacramento de nuestra Fe.
ANUNCIAMOS TU MUERTE, SEÑOR,
PROCLAMAMOS TU RESURRECCIÓN,
¡VEN SEÑOR JESÚS!
Por eso, nosotros, Señor, al celebrar ahora
el memorial de nuestra redención,
recordamos la muerte de Cristo,
y su descenso al lugar de los muertos,
proclamamos su resurrección
y ascensión a tu derecha;
y mientras esperamos su venida gloriosa,
te ofrecemos su Cuerpo y su Sangre,
sacrificio agradable a ti
y salvación para todo el mundo.
Dirige tu mirada sobre esta víctima
que tú mismo has preparado a tu Iglesia,
y concede a cuantos compartimos
este pan y este cáliz,
que congregados en un solo cuerpo,
por el Espíritu Santo,
seamos en Cristo, víctima para tu alabanza.
ALABANZA DE TU GLORIA.
ALABANZA DE TU GLORIA.
Acuérdate, Señor, de todos aquellos
por quienes ofreciste este sacrificio;
de tu servidor el Papa ...
de nuestro obispo ..., del orden episcopal
de todo el clero, de cuantos aquí reunidos
hacemos esta oblación,
de todo tu pueblo santo
y de aquellos que te buscan
con sincero corazón.
Acuérdate también de los que
murieron en la Paz de Cristo
y de todos los difuntos
cuya fe solo tú conociste.
Padre, misericordioso,
que todos tus hijos nos reunamos
en la heredad de tu reino.
con María, la Virgen Madre de Dios,
y con los apóstoles y los santos;
y allí, junto con toda la creación,
libre ya de pecado y de muerte,
te glorifiquemos por Cristo, Señor nuestro,
por quien concedes al mundo
todos los bienes.
Por Cristo, con Cristo y en Cristo,
a ti Dios Padre omnipotente
en la unidad del Espíritu Santo
todo honor y gloria,
por los siglos de los siglos.
AMÉN, AMÉN, AMÉN, AMÉN.
192
Prefacio para Adviento y Navidad
Prefacio de Adviento II – Melodía para el tiempo de Adviento y Navidad
El Señor esté con vosotros.
Y CON TU ESPÍRITU.
Levantemos el corazón.
LO TENEMOS LEVANTADO
HACIA EL SEÑOR.
Demos gracias al Señor, nuestro Dios.
ES JUSTO Y NECESARIO,
ES JUSTO Y NECESARIO.
En verdad es justo y necesario,
es nuestro deber y salvación
darte gracias siempre y en todo lugar,
Señor, Padre Santo, Dios todopoderoso
y eterno, por Cristo, Señor Nuestro.
A quien todos los profetas anunciaron,
la Virgen esperó con inefable amor de Madre,
Juan lo proclamó ya próximo
y señaló después entre los hombres.
El mismo Señor nos concede ahora
prepararnos con alegría,
al misterio de su nacimiento,
para encontrarnos así, cuando llegue,
velando en oración y cantando su alabanza.
Por eso, con los ángeles y arcángeles
y con todos los coros celestiales,
cantamos sin cesar el himno de tu gloria:
SANTO, SANTO, SANTO ...
193
Prefacio para el Tiempo Pascual
Prefacio de Pascua I – Melodía para el tiempo Pascual
El Señor esté con vosotros.
Y CON TU ESPÍRITU.
Levantemos el corazón.
LO TENEMOS LEVANTADO
HACIA EL SEÑOR.
Demos gracias al Señor, nuestro Dios.
ES JUSTO Y NECESARIO,
ES JUSTO Y NECESARIO.
En verdad es justo y necesario,
es nuestro deber y salvación
glorificarte siempre, Señor,
pero más que nunca en este día
en que Cristo, nuestra Pascua,
ha sido inmolado.
Él es el verdadero cordero
que quitó el pecado del mundo.
MURIENDO
DESTRUYÓ NUESTRA MUERTE,
RESUCITANDO
RESTAURÓ NUESTRA VIDA.
Por eso, con esta efusión de gozo pascual,
el mundo entero se desborda de alegría,
y con la asamblea de los ángeles
y de los santos, cantamos,
cantamos el himno de tu gloria:
SANTO, SANTO, SANTO ...
194
Pregón Pascual
Pregón solemne de la Vigilia Pascual
Exulten los coros de los ángeles,
exulte la asamblea celeste,
y un himno de gloria
aclame el triunfo del Señor resucitado.
Alégrese la tierra, inundada por la nueva luz.
EL ESPLENDOR DEL REY
DESTRUYÓ LAS TINIEBLAS,
DESTRUYÓ LAS TINIEBLAS,
LAS TINIEBLAS DEL MUNDO.
Que se alegre nuestra madre la Iglesia,
resplandeciente de la gloria de su Señor;
y que en este lugar resuene unánime
la aclamación de un pueblo en fiesta.
El Señor esté con vosotros.
Y CON TU ESPÍRITU.
Levantemos el corazón.
LO TENEMOS LEVANTADO HACIA EL SEÑOR.
Demos gracias al Señor, nuestro Dios.
ES JUSTO Y NECESARIO …
Realmente es justo y necesario
exaltar con el canto la alegría del espíritu
y elevar un himno al Padre Todopoderoso,
y a su único Hijo, Jesucristo.
Él ha pagado por todos al eterno Padre
la deuda de Adán, y con su sangre,
derramada por amor, ha cancelado
la condena antigua del pecado.
Ésta es la Pascua,
en que se inmola el Cordero.
Ésta es la noche en que fueron liberados
nuestros padres de Egipto.
Ésta es la noche
que nos salva de la oscuridad del mal.
ÉSTA ES LA NOCHE EN QUE CRISTO
HA VENCIDO LA MUERTE
Y DEL INFIERNO RETORNA VICTORIOSO.
¡Oh admirable condescendencia de tu amor!
¡Oh incomparable ternura y caridad!
¡Por rescatar al esclavo has sacrificado al Hijo!
Sin el pecado de Adán,
Cristo no nos habría rescatado.
¡OH FELIZ CULPA QUE MERECIÓ
TAN GRANDE REDENTOR!
¡OH FELIZ CULPA!
¡Oh noche maravillosa
en que despojaste al faraón
y enriqueciste a Israel!
¡Oh noche maravillosa!
Tú sola conociste la hora
en que Cristo resucitó.
¡Oh noche que destruyes el pecado
y lavas todas nuestras culpas!
¡Oh noche realmente gloriosa
que reconcilias al hombre con su Dios!
ÉSTA ES LA NOCHE EN QUE CRISTO
HA VENCIDO LA MUERTE
Y DEL INFIERNO RETORNA VICTORIOSO.
En esta noche acepta, Padre santo,
este sacrificio de alabanza que la Iglesia
te ofrece por medio de sus ministros
en la liturgia solemne de este cirio,
que es el signo de la nueva luz.
Te rogamos, Señor, que este cirio.
ofrecido en el honor
de tu nombre, brille radiante,
llegue hasta ti, como perfume suave,
se confunda con las estrellas del cielo.
Lo encuentre encendido el lucero de la mañana,
esa estrella que no conoce el ocaso.
QUE ES CRISTO, TU HIJO RESUCITADO,
RESUCITADO DE LA MUERTE.
AMÉN, AMÉN, AMÉN.
208
Consolad a mi pueblo
Isaías 40,1-11
CONSOLAD A MI PUEBLO,
Y HABLAD AL CORAZÓN DE JERUSALÉN
Y DECIDLE QUE SE ACABA SU ESCLAVITUD.
¡Ohey! Una voz en el desierto grita:
«preparad el camino, la senda al Señor.»
PORQUE EL SEÑOR VIENE CON POTENCIA,
TRAE CONSIGO EL PREMIO.
COMO EL PASTOR REÚNE SU REBAÑO;
LLEVA AL CORDERILLO EN SUS BRAZOS.
Como el pastor conduce con cuidado
las ovejas que van a ser madres;
como el pastor que lleva a sus hombros
la oveja perdida.
CONSOLAD A MI PUEBLO …
212
El mismo Dios
2ª Corintios 4,6-12
El mismo Dios que dijo:
“De las tinieblas brille la luz”,
es el mismo que ha hecho brillar la luz
en nuestros corazones,
para irradiar el conocimiento de su gloria,
que está en el rostro de Cristo.
QUE ESTÁ EN EL ROSTRO DE CRISTO.
PERO LLEVAMOS ESTE TESORO
EN VASOS DE BARRO.
Para que se manifieste
que lo sublime de este amor
viene de Dios, viene de Dios
y que no viene de nosotros.
LLEVANDO SIEMPRE
EN NUESTRO CUERPO
EL MORIR DE JESÚS,
PARA QUE SE MANIFIESTE
EN NUESTRO CUERPO
QUE ESTÁ RESUCITADO.
Atribulados en todo, mas no desesperados;
perseguidos, mas nunca abandonados;
derribados, mas no aniquilados.
LLEVANDO SIEMPRE …
Y MIENTRAS NOSOTROS MORIMOS
EL MUNDO RECIBE LA VIDA.
LLEVANDO SIEMPRE …
224
No sufras por los malvados
Salmo 37 (36)
NO SUFRAS POR LOS MALVADOS,
NO ENVIDIES A LOS QUE OBRAN MAL.
SE SECARÁN COMO LA HIERBA,
COMO EL CÉSPED SE AGOSTARÁN.
Confía en el Señor y haz el bien,
habita tu tierra y sé leal,
sea el Señor tu delicia
y él te dará lo que ansía tu corazón.
Encomienda tu camino al Señor
y espera en él,
confía en él, que actuará;
hará brillar tu justicia,
hará brillar tu lealtad.
NO SUFRAS POR LOS MALVADOS …
Cohíbe tu ira, reprime el coraje,
no te exasperes, no sea que obres mal;
los que obran mal son excluidos,
los que esperan en el Señor
en la tierra entrarán.
Aguarda un momento, desapareció el malvado,
fíjate en su sitio: ya no está;
en cambio los mansos poseen la tierra,
gozan de paz, de paz disfrutarán.
NO SUFRAS POR LOS MALVADOS …
225
Oh Señor, mi corazón ya no es ambicioso
Salmo 131 (130)
OH SEÑOR, MI CORAZÓN YA NO ES AMBICIOSO
NI SE ELEVA CON SOBERBIA MI MIRADA,
NI VOY EN BUSCA DE COSAS GRANDES
QUE SON SUPERIORES A MIS FUERZAS.
Aquietada y acallada está mi alma
como un niño pequeño en brazos de su madre.
¡Como un niño amamantado está mi espíritu,
como un niño, dentro de mí!
OH SEÑOR, MI CORAZÓN YA NO ES AMBICIOSO …
Aquietada y acallada está mi alma …
¡Espere, Israel, en el Señor!
¡ESPERE, ISRAEL, EN EL SEÑOR!
¡Espere, Israel, ahora y siempre!
226
Señor, Tú me escrutas y conoces
Salmo 139 (138)
Señor, tú me escrutas y conoces;
tú sabes cuando me acuesto y me levanto,
sondeas mis pensamientos desde lejos;
te son familiares todas mis sendas.
Que no está aún en mi lengua la palabra,
y ya tú, Señor, te la sabes toda;
me acosas por detrás,
me atacas por delante,
y al mismo tiempo
tienes puesta sobre mí tu mano.
Y esto es ciencia misteriosa para mí,
ciencia que no llego a comprender,
ciencia tan alta, que yo no la entiendo.
¿A DÓNDE IRÉ YO LEJOS DE TU ESPÍRITU,
A DÓNDE DE TU ROSTRO ESCAPARÉ?
SI SUBO HASTA EL CIELO, ALLÍ ESTÁS TÚ,
SI DESCIENDO HASTA LA MUERTE,
ALLÍ TE ENCUENTRO.
ME ACOSAS POR DETRÁS,
ME ATACAS POR DELANTE,
Y AL MISMO TIEMPO
TIENES PUESTA SOBRE MÍ TU MANO.
Y ESTO ES CIENCIA MISTERIOSA PARA MÍ,
CIENCIA QUE NO LLEGO A COMPRENDER,
CIENCIA TAN ALTA,
QUE YO NO LA ENTIENDO.
Señor, tú me escrutas y conoces,
sondeas y pruebas mi corazón;
para que no siga un camino de doblez,
para que no me aparte nunca
de tu camino.
227
Shemá Israel
Deuteronomio 6,4-9
Shemá Israel, Shemá Israel.
Adonai Elohenu, Adonai Ejad.
SHEMÁ ISRAEL, SHEMÁ ISRAEL.
ADONAI ELOHENU, ADONAI EJAD.
ESCUCHA ISRAEL, ESCUCHA ISRAEL.
EL SEÑOR ES NUESTRO DIOS,
EL SEÑOR ES UNO.
Amarás al Señor tu Dios
con todo tu corazón,
con toda tu alma,
con todas tus fuerzas.
Graba estas palabras
como señal en las palmas de tus manos;
como memorial entre tus ojos;
en las jambas de tu casa y en las puertas.
SHEMÁ ISRAEL …
ESCUCHA ISRAEL …
Enséñalo a tus hijos, Israel,
háblales en casa,
cuando camines por la calle,
cuando te acuestes y te levantes.
Éste es el primer
mandamiento de la vida;
el segundo es igual a éste:
Ama a tu prójimo como a ti mismo
y tendrás, tendrás la Vida Eterna.
SHEMÁ ISRAEL …
ESCUCHA ISRAEL …
Shemá Israel,
SHEMÁ ISRAEL,
ADONAI ELOHENU,
ADONAI EJAD.
235
Como destila la miel
Oda XL de Salomón
COMO DESTILA LA MIEL
EL PANAL DE LAS ABEJAS
Y FLUYE LA LECHE
EN LA MUJER QUE AMA A SUS HIJOS;
COMO MANAN DE LA FUENTE
LAS TRANQUILAS AGUAS
ASÍ MI CORAZÓN
DERRAMA SU ALABANZA.
Y de mis labios brota
un nuevo canto hacia el Señor;
y mi lengua siente
la dulzura de su nombre;
y mi cuerpo se deleita
con sus canciones.
Porque su luz serena
apacigua todos mis males;
porque su mirada simple de amor
cura mi corazón.
PORQUE LA VIDA INMORTAL
HA PUESTO SU TIENDA
DENTRO DE NOSOTROS.
AALELUYA, AALELUYA,
AAALELUU, ALELÚ, ALELUYA.
AALELUYA, AALELUYA,
AAALELUU, ALELÚ, ALELUYA.
COMO DESTILA LA MIEL
Y mi rostro se ilumina con su alegría;
y mi espíritu se goza en sus amores;
mi corazón, lleno de su luz,
siente su mirada amorosa.
Porque el temor en él se confía;
porque la salvación en él es segura.
PORQUE LA VIDA INMORTAL …
COMO DESTILA LA MIEL …
237
Cuando dormía
Cantar de los Cantares 5,2ss
Cuando dormía, mi corazón velaba.
¡La voz de mi amado oí!:
«¡Abre, hermana mía, ábreme paloma!
Que mi cabeza está cubierta de rocío
y mis cabellos del relente de la noche.»
¡Metió la mano
por el agujero de la cerradura;
y toda entera me estremecí!
Me levanté corriendo,
y mis manos destilaron mirra,
mirra fluida mis dedos,
por el pestillo de la puerta.
OS CONJURO, HIJAS DE JERUSALÉN,
SI ENCONTRÁIS A MI AMADO,
DECIDLE QUE MUERO DE AMOR.
Abrí, abrí a mi amado,
pero no estaba, ya había pasado.
Y el alma se me escapó en su huida.
Lo busqué y no lo hallé,
lo llamé, lo llamé,
y no me respondió.
Me encontraron los guardias,
que hacen la ronda, me golpearon,
me desnudaron
los guardias de las murallas.
OS CONJURO, HIJAS DE JERUSALÉN …
¡Ay, si tú fueras mi hermano!
Te podría besar
al encontrarte en la puerta.
OS CONJURO, HIJAS DE JERUSALÉN …
238
El Espíritu del Señor está sobre mí
Lucas 4,18 – Isaías 61,1-3
EL ESPÍRITU DEL SEÑOR ESTÁ SOBRE MÍ,
EL ESPÍRITU DEL SEÑOR ESTÁ SOBRE MÍ.
PUES ME HA UNGIDO, ME HA ENVIADO,
PARA ANUNCIAR LA SALVACIÓN,
PARA ANUNCIAR LA SALVACIÓN,
PARA ANUNCIAR LA SALVACIÓN
A LOS POBRES DE QUEBRANTADO CORAZÓN.
Para que los ciegos vean,
los cojos anden,
los leprosos queden limpios;
para anunciar la salvación.
EL ESPÍRITU DEL SEÑOR ESTÁ SOBRE MÍ …
240
En una noche oscura
Subida al Monte Carmelo – San Juan de la Cruz
EN UNA NOCHE OSCURA,
CON ANSIAS, EN AMORES INFLAMADA,
¡OH DICHOSA VENTURA!
SALÍ SIN SER NOTADA,
ESTANDO YA MI CASA SOSEGADA.
A oscuras y segura,
por la secreta escala, disfrazada,
¡oh dichosa ventura!
a oscuras y encelada,
estando ya mi casa sosegada.
En la noche dichosa,
en secreto, que nadie me veía,
ni yo miraba cosa,
sin otra luz y guía
sino la que en el corazón ardía.
Aquesta me guiaba
más cierto que la luz del mediodía,
adonde me esperaba
quien yo bien me sabía,
en parte donde nadie parecía.
¡Oh noche que guiaste!,
¡oh noche amable más que la alborada!,
¡oh noche que juntaste,
amado con amada,
amada en el amado transformada!
¡OH NOCHE QUE GUIASTE! …
EN UNA NOCHE OSCURA …
249
Me robaste el corazón
Cantar de los Cantares 4,9-16.5,1
ME ROBASTE EL CORAZÓN,
ME ROBASTE EL CORAZÓN,
HERMANA MÍA, ESPOSA,
ME ROBASTE,
ME ROBASTE EL CORAZÓN.
¡Qué hermosos tus amores,
qué hermosos tus amores!
¡La fragancia de tus perfumes,
más que todos los bálsamos de amor!
Miel destilan tus labios,
esposa mía, esposa mía.
Miel y leche debajo de tu lengua.
La fragancia de tus vestidos es la
fragancia del Líbano, esposa, esposa mía,
¡más sabrosos tus amores son que el vino!
Huerto eres cerrado, hermana mía,
fuente sellada, esposa mía.
Tus frutos un paraíso de granados,
de nardo y azafrán, de mirra y áloe.
¡Levántate cierzo, ábrego, y ven!
¡LEVÁNTATE CIERZO, ÁBREGO, Y VEN!
¡Sopla en mi huerto
para que exhale sus aromas!
¡SOPLA EN MI HUERTO
PARA QUE EXHALE SUS AROMAS!
Y pueda entrar mi amado en su huerto
y coma de sus frutos exquisitos.
Ya he entrado en mi huerto, esposa mía;
he comido mi miel en su panal,
he bebido mi vino con su leche.
¡Amigos, venid, bebed,
oh queridos y embriagaos!
¡AMIGOS, VENID, BEBED,
OH QUERIDOS Y EMBRIAGAOS!
ME ROBASTE EL CORAZÓN …
252
Quién es esta que sube del desierto
Cantar de los Cantares 8,5-7
¿QUIÉN ES ÉSTA QUE SUBE DEL DESIERTO,
QUIÉN ES ÉSTA QUE SUBE DEL DESIERTO,
APOYADA EN SU AMADO, EN SU AMADO,
APOYADA EN SU AMADO?
Debajo del manzano te desperté,
allí donde te concibió tu madre,
allí donde tu madre te dio a luz,
allí donde tu madre te dio a luz.
¿QUIÉN ES ÉSTA QUE SUBE DEL DESIERTO …
Llévame como un sello en tu corazón,
como un tatuaje en tu brazo.
Porque es fuerte el amor como la muerte.
Y las aguas no lo pueden apagar,
ni los ríos lo pueden anegar.
Que si tú dieras los bienes de tu casa por el amor,
sólo encontrarías el desprecio.
¿QUIÉN ES ÉSTA QUE SUBE DEL DESIERTO …
257
Ven del Líbano
Cantar de los Cantares 4,8ss
Ven del Líbano, esposa,
ven del Líbano, ven.
Tendrás por corona la cima de los montes,
la alta cumbre del Hermón.
Tú me has herido, herido el corazón.
¡Oh, esposa, amada mía!
Ven del Líbano, esposa,
ven del Líbano, ven.
BUSQUÉ EL AMOR DEL ALMA MÍA,
LO BUSQUÉ SIN ENCONTRARLO.
ENCONTRÉ EL AMOR DE MI VIDA,
LO HE ABRAZADO Y NO LO DEJARÉ JAMÁS.
Yo pertenezco a mi amado y él es todo para mí.
Ven, salgamos a los campos,
y nos perderemos por los pueblos.
Salgamos al alba a las viñas
y recogeremos de su fruto.
Yo pertenezco a mi amado y él es todo para mí.
BUSQUÉ EL AMOR DEL ALMA MÍA …
Levántate deprisa, amada mía,
ven, paloma, ven.
Porque el invierno ya ha pasado,
el canto de la alondra ya se oye.
Las flores aparecen en la tierra,
el fuerte sol ha llegado.
Levántate deprisa, amada mía,
ven, paloma, ven.
BUSQUÉ EL AMOR DEL ALMA MÍA …
Como un sello en el corazón,
como tatuaje en el brazo.
El amor es fuerte como la muerte,
las aguas no lo apagarán.
Dar por este amor
todos los bienes de la casa
sería despreciarlo.
Como un sello en el corazón,
como tatuaje en el brazo.
BUSQUÉ EL AMOR DEL ALMA MÍA …